EL MMS Y LAS “REMISIONES ESPONTÁNEAS”

Con motivo de las recientes detenciones de Andreas Kalcker y otras personas relacionadas con la difusión del MMS en España, durante el transcurso de una charla informativa, queremos rendir homenaje al MMS, haciéndolo protagonista del estreno de nuestro blog.

Pero, ¿qué es el MMS, que tanta polémica está suscitando?

Es una solución mineral al 28% de Clorito Sódico, que al activarlo con Ácido Cítrico diluido, libera Dióxido de Cloro, un oxidante suave, capaz de destruir patógenos de diversa naturaleza, como virus, bacterias, hongos y parásitos, oxidar metales pesados y neutralizar una gran variedad de venenos y substancias tóxicas, pero incapaz de dañar a las células sanas, debido al potencial eléctrico claramente superior de estas.

El Clorito Sódico es un mineral hermano del Cloruro Sódico, o sal común. El Ácido Cítrico está presente en nuestras frutas cítricas, como el limón.

Para entender lo que puede hacer el MMS, haremos uso de una célebre cita de nuestro amigo Andreas Kalcker: “El MMS no cura nada, pero puede causar una remisión espontánea”.

Estas remisiones espontáneas son las que están produciendo una gran reacción pruriginosa, de tipo sarpullido urticante en las esferas médico farmacéuticas, ya que, según palabras del descubridor accidental de las propiedades del MMS, Jim Humble, en su libro Master Mineral Solution del tercer milenio, “…si los pacientes en el hospital más cercano fueran tratados con esta solución, más del 50% estaría de vuelta en casa en menos de una semana, y el 90% estaría en casa en menos de dos meses. “

¿En qué casos puede provocar este tipo de remisiones espontáneas?

Jim Humble, en la introducción del mencionado libro lo deja muy claro: “…la malaria, una enfermedad que normalmente se supera con este suplemento en tan solo cuatro horas. Este hecho ha sido probado por medio de ensayos clínicos…” “…no hubo ni un solo caso fallido y eliminando en todos los casos el parásito de la malaria…” “…más de ochocientos casos de SIDA se han tratado con éxito en Malawi, con todos los análisis anteriores y posteriores al tratamiento y la documentación adecuada…”

Otras remisiones espontáneas citadas en su libro son la arteriosclerosis, la artritis, el asma, la borreliosis, el cáncer, incluyendo leucemia, el virus coxsackie, abscesos dentales, encías infectadas y piorrea, diabetes, dolencias oculares de tipo infeccioso, gripe, úlceras craneales, hepatitis, herpes, VIH y SIDA, picaduras de insectos, malaria, problemas de piel…

Hasta la fecha, más de 5 millones de personas han tomado MMS en todo el mundo, sin un solo caso documentado de fallecimiento por dicho uso.

Por su parte, “el uso inadecuado de medicamentos es la causa de cerca de 250.000 muertes cada año en Europa y del 5% de los ingresos hospitalarios”. Fuente: Blogdefarmacia.com

Y yo me pregunto, ¿por qué no nos dejan “intoxicarnos” con una sustancia tan peligrosa como el MMS, en vez de “curarnos” con esos medicamentos tan seguros que fabrican las farmacéuticas?

Al amparo de La Constitución y bajo su manto protector, queremos expresar y difundir esta información a todo aquel que quiera recibirla.

Artículo de la Constitución Española sobre la libertad de expresión /20.1 

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